- 11 junio, 2015
Formulario de contacto
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Vasectomía
La vasectomía es un método para la esterilización masculina. Es sencillo, seguro con apenas efectos secundarios. Actualmente se utiliza la técnica sin bisturí con una incisión mínima. Consiste en la sección ligadura y coagulación de los conductos deferentes, estos son los conductos que llevan los espermatozoides del testículo a las vesículas seminales. Se realiza con anestesia local y de manera ambulatoria en a penas veinte minutos.
Vaso-vasostomía
La vaso-vasostomía es la intervención quirúrgica destinada a volver a reconstruir los conductos deferentes que se seccionaron durante la vasectomía. Esta unión permitirá el paso de espermatozoides y así la recuperación de la capacidad de concebir. Es una intervención quirúrgica que se realiza con anestesia local sin ingreso hospitalario. Para la realización de la técnica es imprescindible el microscopio óptico y consiste en localizar ambos cabos de los conductos deferentes y posteriormente unirlos mediante una técnica compleja de sutura en dos capas con puntos sueltos de hilos extremadamente finos (10/0).
Es una técnica muy compleja que precisa de una gran experiencia del cirujano. El éxito del procedimiento depende tanto de la experiencia del cirujano como del tiempo transcurrido desde la vasectomía hasta su reanastomisis y de la técnica de vasectomía realizada.
Cirugía de las dismorfofobias peneanas
Bajo este nombre se agrupan todas aquellas cirugías que tienen como cometido reparar todas aquellas alteraciones morfológicas del pene. Así podemos hablar de las cirugías de realineamiento peneano ya sea por pene combo congénito o enfermedad de la Peyronie (técnicas de Nesbit, Remplazamiento por parche,…) o bien de alargamiento o engrosamiento peneano, debiendo siempre ajustarse a cada caso concreto la técnica oportuna más fiable para resolver el problema.
Neurotomía peneana
Cuando los tratamientos farmacológicos y psicológicos del tratamiento de la eyaculación retrógrada fallan, se puede considerar practicar una neurotomía a nivel del surco balanoprepucial para intentar con ello solucionar el problema. Es una técnica controvertida y si bien sencilla en la definición exige una experiencia contrastada. La técnica se puede practicar con anestesia local y de manera ambulatoria. Los cuidados postoperatorios son sin embargo de extremo cuidado, obligando al reposo y a evitar las erecciones en los días sucesivos.
Prótesis de pene
La prótesis de pene constituye el último escalón en el protocolo de tratamiento para la disfunción eréctil. Ésta puede considerarse en aquellos pacientes que no responden a la farmacoterapia o que buscan una solución definitiva del problema. Existen varios dispositivos, aunque todos consisten en 2 cilindros de silicona o bioflex, de estructura anatómica, que se introducen dentro de los cuerpos cavernosos del pene y producen la rigidez necesaria para una buena relación sexual.
Hay dispositivos maleables (o semirrígidos) e inflables (de dos o tres piezas), pero la mayoría de los pacientes prefieren dispositivos inflables de tres piezas debido a que las erecciones que se logran son más “naturales”.